martes, mayo 19, 2015

Mi propiedad capitulo II



Ohaiio sekaii, como están sus labores de escuela?, yo tengo muy pesado todo, y este mes es mi examen, ahhh, bueno me voy para no molestarlos con mis gritos desesperados pero les dejo el siguiente capitulo de este nuevo fanfic, si te gusta coméntalo, quiero saber que les parece.

-Sakura por favor pásame la tarea- suplicaba Naruto
-no Naruto pudiste hacerla pero te la pasaste desperdiciando el tiempo, pídeselo a otra persona
-ahhhh te juro que la estaba haciendo pero..- Naruto trato de recordar que sucedió, su mundo estaba en blanco
-ves solo holgazaneaste
-na-Naruto- una delicada y pequeña voz lo llamo
-oh Hinata ¿Qué sucede?
-si quieres puedo pasarte la tarea
-en serio, gracias eres la mejor- sonrió Naruto
-Hinata no deberías pasársela solo fomentas su holgazanería
-NO- Hinata elevo un poco la voz pero después se calmó permitiéndole hablar- no es así Naruto, no es así, ahora debe tener alguna buena razón, no hay porque juzgarlo
-eres demasiado buena Hinata- finalizo Sakura retirándose a su lugar
Sasuke observaba como su pelirrubio compañero pasaba la tarea a gran velocidad, tratando de terminar antes que el profesor cruzara por la puerta, después de un par de minutos retiro su mirada y observo su tarea, la cual estaba limpia, impecable, con la mejor letra, perfectamente hecha
-buenos días chicos- entro el profesor
-casi- Naruto casi terminaba- listo- sonrió para sí, cerro el cuaderno de Hinata- gracias has sido de gran ayuda Hinata
-por nada
-comencemos por revisar la tarea
Después de que el profesor calificara se detuvo para felicitar a un alumno
-chicos quisiera que felicitaran a su compañero Sasuke, él es muestra de cómo deben entregarse los trabajos- decía el maestro mientras tenia al frente al alumno mencionado- por favor denle un aplauso- sus compañeros le aplaudieron todos excepto Naruto que miraba por la ventana, el no reconocería algo tan tonto como eso, por supuesto que su indiferencia llamo la atención del chico de ojos obscuros que observaba desde el frente del salón.

-No entiendo porque felicitar algo tan simple como una tarea- hablaba Naruto mientras caminaba a lado de Shikamaru y Choji
-Eso solo fomenta su ego y aloca aún más a las chicas- Dijo Choji mientras comía unas papitas
-Es molesto nos dejan en ridículo- agrego Shikamaru para después dar un gran bostezo
-Deberían de dejar de quejarse y hacer sus tareas como Sasuke-kun- los había alcanzado Ino y consiguió escuchar algunos de sus quejidos
Mientras caminaban vieron la cafetería nueva
-Aun continua esa promoción- Dijo Ino viéndola
-A mí no me gusta el café- Dijo Choji
-Ahhh podría ser la cita perfecta con Sasuke-kun
-Acaso ustedes las chicas se la pasan pensando en el- Pregunto Shikamaru, sin recibir respuesta de Ino ya que continuaba viendo la cafetería con ojos brillosos
-Una cita ehh- dijo Naruto
-Invitaras a Sakura- Pregunto Choji
-No, seguramente ha de pensar lo mismo que Ino, la cita perfecta con Sasuke
-Vámonos, creo que Ino va seguir ahí parada por un par de horas- Comenzó a caminar Shikamaru un par de pasos después le siguieron Choji y Naruto
Naruto al llegar a su casa boto la mochila en uno de los sillones llenos de ropa, libros, etc. Se estiro y se metió a la ducha.
Sasuke por otra parte en su casa se preparaba para salir de compras para poder hacer la comida.
Naruto salió secándose la cabeza, se acercó al refrigerador y no vio nada de comida, suspiro y cerro fuertemente, debía ir de compras.
Sasuke se encontraba seleccionando algunas verduras, e incluso fue a la pescadería ya que hacía mucho que no comía pescado.
Naruto caminaba por la banqueta, casi llegaba al mercado, aunque realmente no iba ahí, pensaba meterse en una de esas tiendas y comprar un poco de comida deshidratada, el no sabía cocinar muy bien e igual no tenía tiempo para hacerlo, entre el trabajo, las tareas y la escuela apenas si dormía bien. Mientras caminaba se cruzó con Sasuke, él ni siquiera volteo a verlo lo paso de largo, "engreído", dijo para sí mismo Naruto y comenzó a realizar sus compras, ese día era de su descanso por lo que decidió ponerse al corriente con algunas tareas después de comer.

La noche se vino demasiado pronto para aquellos en que un día solo era eso un día, no había nada de especial, una vida desabrida, hacía falta algo de condimento o un extraño evento para que ambos se vieron reflejados.


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